viernes, 29 de junio de 2007

Caso particular, principio antrópico, casualidades


Un ejemplo típico de la demostración de que la estupidez humana no tiene límites se ve constantemene en televisión, en artículos periodísticos y otros repositorios de sabiduría popular.
Me refiero a uno de los usos de los datos y la supuesta "estadística" para dar noticias.
Si analizamos a posteriori un suceso, puede parecernos que hay una relación causal dónde no la hay. Feynman dijo una vez:

“Sabes, anoche me pasó una cosa asombrosa. Vi un coche que tenía la matrícula ARW357. ¿Te imaginas?. De todos los millones de matrículas que hay en el estado, ¿qué posibilidades había de que yo viese anoche ésa en concreto?. ¡Es asombroso.”

Pues si, es cierto. Las probabilidades son muy muy pequeñas. Una vez que elegimos al azar un un dato, si pensamos en lo dificil que sería encontrar ese dato, podemos llegar a conclusiones erróneas.
¿Cuales son las probabilidades de que en la lotería de navidad toque el 11111? Las mismas que cualquier otro, pero nos parece mucho más improbable. Está claro que si comparamos ese número en particular con la probabilidad de que toque uno que no sea tan característico es mucho menor.
Es lo mismo que sucede en el principio antrópico. Aunque existen varios "sabores" del principio, básicamente dice que si el unverso no fuese como es (o que si no hubiese evolucionado como evolucionó) nosotros no existiríamos, así que preguntarse porqué existimos no tiene sentido.
¿Cual es la probabilidad de que haya un planeta lo suficientemente estable, con agua, a la distancia adecuada del sol, ...? Bastante pequeña. Pero hemos escogido el caso particular. Precisamente en el punto en el que se han dado las condiciones para que haya vida, hay vida. Si fuésemos nubes de silicio en el espacio inter-galáctico, diríamos (o lo que sea que hiciésemos): "qué casualidad, un entorno vacío, sin radicación, justo lo necesario para que existamos".

5 comentarios:

Mario Castro dijo...

Sin que sirva de precedente, no estoy de acuerdo contigo respecto al principio antrópico. En realidad, la rama más científica del mismo, liderada por el mismísimo Kittel, incluso realiza cálculos que muestran (no sé si usar la palabra demostrar) que si la constante de planck fuese un 5 por cierto distinta, y cosas por el estilo, los átomos no serían tan estables, etc, etc. El principio antrópico se reduce, este universo es altamente improbable (si cambiásemos las constantes fundamentales sería imposible la vida en él), ergo es un Universo con un propósito. Estoy leyendo un libro ahora de Kittel de unas 500 páginas (sólo llevo 15, ups). Ya os contaré algo más cuando lo termine.

Quiero leer más a fondo a ver hasta dónde puede llegar. No olvidemos que la ciencia también camina sobre suelo de cristal: ¿por qué las matemáticas describen la naturaleza con tanta exactitud? ¿Por qué las leyes de la Física son leyes, y no cambian caprichosamente de sitio en sitio? No lo sabemos, simplemente lo conjeturamos. Creo que el principio antrópico (el serio) utiliza este tipo de conjeturas, no fantasías bíblicas ni cosas por el estilo.

Unknown dijo...

Pues no veo que no estés de acuerdo. Si la constante de Planck fuese distinta, no existíriamos para preguntarnos cómo ha dado la casualidad de que sea como es...

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con lo que dices en el artículo, Falevian, y también con lo que le respondes a donlockwood, que en realidad me parece que, en efecto, está de acuerdo contigo pero no se ha dado cuenta, ¡je!

A mí particularmente el Principio Antrópico siempre me ha parecido una tontería: es como no decir nada, sencillamente. Admitámoslo: no sabemos por qué estamos aquí; no sabemos por qué existe el Universo; incluso es posible que ni siquiera tenga sentido formular estas preguntas.

Todo lo que sabemos (y, quizás, todo lo que _sabremos_) es que el Universo existe, y que nosotros existimos. "[Los seres humanos] somos una forma que tiene el Universo de conocerse a sí mismo." (Carl Sagan en "Cosmos"). Es todo lo que podemos hacer: describir el Universo.

Un saludo,
Ijon Tichy
(también conocido como Sciencisto Esperanto)

pd He llegado a este blog por pura casualidad, y seguramente seré lector asiduo (o al menos ocasional). Felicidades por un blog donde se pueden aprender y se puede discutir sobre muchas cosas.

ppd Por cierto, después de leer esa cita de Feyman me han entrado ganas de releer "¿Está usted de broma, Sr. Feynman?". ¡Qué gran libro!

pppd ¿El Kittel que mencionas, donlockwood, es el mismo Kittel que tiene un (famoso) libro (de texto) de física del estado sólido?

Unknown dijo...

Si, yo también creo que está de acuerdo conmigo, pero no lo sabe. De todas formas, como nadie nos pone comentarios, un poco de polémica interna no viene mal.

Benjamin arias sanchez dijo...

Exelente explicacion al principio antropico.